Gabriela Castellanos, directora del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), publicó una carta pidiendo la renuncia de la presidenta Xiomara Castro tras el video del cuñado de Carlos Zelaya reuniéndose con personas vinculadas a la corrupción. Tráfico de drogas en 2013.
El miembro de la sociedad civil afirmó que realiza la solicitud “en mi carácter civil, comprometido con la transparencia e integridad del servicio público. En este sentido, me veo obligado a solicitar oficialmente su renuncia al cargo”.
castellanos Destacó que nombró a personas del entorno familiar de Castro para diversos cargos y recibió confianza, pero estaban conectados con actividades prohibidas.
“Esta solicitud se fundamenta en graves denuncias de narcotráfico que se han hecho contra el entorno familiar que usted designó para construir el Estado en las distintas secretarías; claramente ha colapsado por culpa del crimen organizado, que viola gravemente la confianza pública y los principios éticos que deben guiar la prestación de los servicios públicos”, señaló.
EL el líder del ANC También instó al presidente a asumir la responsabilidad de su gobierno y no defenderse culpando a otros.
“Ignorar estas conexiones y atacar a otras personas identificadas como una medida desesperada para desviar estas graves acusaciones no recordará a los ciudadanos que todavía estamos en un estado de adicción a las drogas con líderes que han utilizado el dinero del crimen organizado para ganar poder y sacar provecho de él”. de quienes están “sirviendo justicia en este momento”, dijo.
Castellanos agregó que “su permanencia como presidente de la república no sólo atenta contra la credibilidad estado de derecho, perturba la paz y la seguridad de la población. Por lo tanto, su renuncia seguramente restaurará la integridad y la moral política en el servicio público. Honduras“.
Finalmente, pidió al presidente que responda al pedido de renuncia “por el bien del país”.
En la transmisión nacional de ayer, el Presidente Castro dedicó apenas 20 segundos al tema del video de Carlos Zelaya, confirmando su condena a las negociaciones entre políticos y narcotraficantes.