La semana pasada apareció muerto Richard David Ávila Nieto (14), estudiante del Instituto España Jesús Milla Selva; Ante esta situación, las autoridades del centro educativo han endurecido las medidas de seguridad para el resto de estudiantes.
En las puertas, los profesores realizan controles muy exhaustivos de las mochilas que cada adolescente lleva consigo cada día, para evitar que lleven objetos que no deberían.
Asimismo, se verifica que vistan el uniforme correcto de la institución, tanto en su uniforme de diario como en su uniforme de educación física, y que porten su carné que los identifica como estudiantes de Milla Selva.
Por ahora, a los chicos se les ha ordenado no llevar mochilas ni bolsos para evitar el ingreso de objetos punzantes al centro educativo.
Mientras que el director de la Policía Nacional, Juan Manuel Godoy, explicó que se están realizando las investigaciones pertinentes, pero que esta muerte está relacionada con “actos relacionados con el narcotráfico”.
“Estamos conociendo este caso y ya vamos muy avanzados en las investigaciones, pero este hecho no es producto de una actividad educativa, es producto de una actividad ilícita que se llama narcotráfico”, afirmó.
Al mismo tiempo, aseguró que hay algunos detalles que no se pueden publicar, porque primero se deben defender los derechos del menor fallecido y los derechos de las autoridades del centro educativo.
“Lamentablemente el hermano de este muchacho fue asesinado hace como 21 días, son situaciones que vienen a raíz de otra acción, que es provocada por hechos relacionados con el narcotráfico”, dijo Godoy.
Por su parte, la madre del menor, Margarita Nieto, exige justicia y respuestas por la muerte de su hijo, al tiempo que niega que su hijo tenga un hermano o que estuviera involucrado con pandillas o narcotráfico.
“No tengo respuesta de la Policía ni de nadie; Sólo me dicen que están investigando. Sólo exijo justicia para mi hijo, justicia para un niño de 14 años. Y me van a tener que hacer justicia porque aquí voy a estar al pie de la bandera”, dijo entre lágrimas.
La madre, junto con la abuela del menor, y otros familiares llegaron al centro educativo donde se encontraban policías y autoridades de la institución. Llevaban carteles pidiendo justicia por la muerte de Richard.
Aseguró que teme por su vida, el plantón que permaneció por mucho tiempo afuera del colegio, logró ingresar al aula donde cursaba el Bachillerato en Banca y Finanzas.
“Mi hijo no tiene hermanos, era hijo único. Mi hijo no tiene hermanos, era hijo único, dejen de inventar señores, dejen de inventar y pónganse a trabajar con las pruebas que dicen tener”.
“Él tiene hermanos en Estados Unidos, pero por parte de padre, pero por mi parte él era mi único hijo. Calumnias es lo que han levantado y ni siquiera tienen autores, los que hicieron esto están libres, y enterré a un niño, enterré sus sueños, enterré mi vida con él”, aseguró Margarita.
La devastada madre junto a sus familiares exigieron que les muestren las pruebas, aseguró que su hijo, a pesar de tener 14 años, cursaba décimo grado, cursando 15 materias con buenas notas.
Según testigos, otros uniformados llevaron al niño a un parque comunitario ubicado en la calle Kennedy, a unos 200 metros del Instituto España Jesús Milla Selva y del costado de la Dirección de Investigaciones Policiales. Posteriormente, en un callejón solitario, los perpetradores habrían arrodillado al joven para matarlo sin piedad.